Hace dos años que sumé un proyecto más a mi labor como wedding planner. En alguna otra ocasión ya os he contado que soy la directora de producción de La Estación, industrial events, un espacio dedicado a la celebración de eventos y bodas.

Hoy retomo esta sección en la que me meto en la piel de mis novias para recomendaros lo que yo haría si me fuera a casar, porque quiero transmitiros por qué elegiría La Estación para celebrar mi boda. Razones hay muchas, pero he seleccionado estas con las que podréis hacer realidad la boda con la que tantas veces os habéis ilusionado.

Si la novia fuera yo… me casaría en La Estación para concentrar en un lugar mágico la ceremonia, la celebración y la primera noche de casada.

Si la novia fuera yo… escogería esta antigua fábrica de ladrillo situada en la provincia de Segovia, por la que hace algunos años atrás pasaba el tren y todavía cuenta con una vieja estación ferroviaria. Actualmente se puede contratar un tren privado que sale desde la estación de Chamartín de Madrid y llega hasta allí. Es, sin duda, uno de los atractivos más originales para trasladar a los invitados a la boda.

Si la novia fuera yo… haría realidad mi sueño de organizar mi boda cuidando al detalle toda la decoración y aprovechando la versatilidad que ofrece este espacio único. Me decantaría por usar un estilo clásico en la decoración ya  que contrasta con el ambiente decadente de la finca.

Si la novia fuera yo… me daría el capricho de preparar una gran boda y exprimir al máximo el amplio espacio disponible en La Estación.

Si la novia fuera yo… no tendría problemas para decidirme por la fecha de la boda, porque en todas estaciones del año las instalaciones de La Estación están preparadas para albergar una boda especial.

Si la novia fuera yo… celebrar mi boda en La Estación sería hacer un guiño romántico a su entorno natural. La antigua fábrica se sitúa a los pies del cordal montañoso denominado “la mujer dormida”, en la sierra de Guadarrama. Según la leyenda medieval representa a una mujer que espera a su amor cubierta por un velo.

Si la novia fuera yo… apostaría por esos elementos industriales, oxidados, desgastados y románticos que me enamoran en las producciones de las revistas, películas y de publicidad. De hecho, allí se han rodado varias series y anuncios.

Si la novia fuera yo… y las temperaturas suaves me lo permitiesen, no me resistiría a transformar el patio central en el espacio de recepción de mis invitados, para que se impregnaran de ese ambiente tan especial nada más llegar.

Si la novia fuera yo…y la climatología fuera adversa la nave principal sería el recinto ideal para el banquete y el baile. Sus altos techos y su estilo vintage proporcionan un ambiente impresionante.

Si la novia fuera yo… y quisiera celebrar una ceremonia religiosa, en las inmediaciones tendría disponibles varios edificios religiosos entre los que destaca la iglesia Parroquial de Otero de Herreros, el pueblo más cercano, obra del arquitecto de la catedral de Segovia Rodrigo Gil de Hontañón.

Si la novia fuera yo… apostaría por una iluminación suave, cálida y por incluir plantas y flores en cada esquina de este recinto renovado para soñar y dejar una huella inolvidable en todos mis invitados.

Si la novia fuera yo… trasladar a mis invitados hasta La Estación no sería un problema. Las instalaciones están ubicadas en Otero de Herreros, a tan solo 35 km de Madrid. Además cuenta con una amplia oferta de alojamiento rural por si alguno tuviera que permanecer algún día más.

Si la novia fuera yo… no me resistiría a vivir con emoción y disfrutar de los momentos previos en la suit nupcial que tieneLa Estación. También sería el lugar de nuestra primera noche de casados, para seguir disfrutando del ambiente decadente y sentimental que desprenden la antiguas paredes de este singular paraje.

… Y si la novia fueras tú, ¿qué razón sería tu favorita para celebrar tu boda en La Estación?